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Cuando confesamos nuestros pecados delante de Dios y nos arrepentimos de corazón, Dios siempre está dispuesto a perdonarnos y devolvernos la paz espiritual. También a través de la confesión y el arrepentimiento por nuestros pecados, estamos restaurando nuestra relación rota con él.
Reflexiona
"Todos pecaron y están privados de la gloria de Dios y son justificados por el don de su gracia, en virtud de la redención realizada en Cristo Jesús" (Romanos 3,23-24).
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Día 32: Yo confieso
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La oración "Yo confieso" que hacemos durante la misa, es una excelente guía para un examen de conciencia. Las partes de esta oración se dividen para ayudarnos a ver dónde necesitamos pedir la gracia de Dios.
Reflexiona
"Yo confieso ante Dios Todopoderoso, y ante ustedes herman... -
Nuestros padres nos contaron
Introducción a la Serie basado en el Salmo 78 (77) que propone la necesidad de reconocer nuestros orígenes.
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Novena to St. Teresa of Ávila - Day E...
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