Todos sabemos que los papás son importantes. ¿Pero qué tanto impacto tienen en nuestra vida? Los papás, o cuidadores primarios, no solo contribuyen a nuestra biología y genética, sino también por todas las otras formas en las que nos forman, especialmente durante nuestros primeros años de vida. Son la única relación que experimentamos en la tierra donde alguien nos ama como hijo o hija, y que también tiene una autoridad y responsabilidad directa sobre nosotros.

Nada reemplaza la relación padre-hijo y su influencia en cómo nos desarrollamos y convertimos en adultos. Si esta relación impacta tanto en las personas que llegamos a ser, ¿cómo podemos honrarla y cuidar de ella toda nuestra vida?

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