Los niños de Fátima crecen en santidad y virtud en respuesta a las apariciones. Lucía tiene una misión especial para difundir la devoción al Inmaculado Corazón de María.
Las profecías que Nuestra Señora predijo comienzan a desarrollarse inmediatamente después de las apariciones y continuaron durante el siglo XX.
Nuestra Señora vuelve a aparecerse a Lucía 12 años después y solicita recibir la Comunión del primer sábado en reparación a su Corazón Inmaculado. Esta solicitud es para todas las personas.
Esperamos la promesa final de Nuestra Señora en Fátima, mientras continuemos respondiendo a sus peticiones de pedir perdón por los pecadores y haciendo cambios que hoy necesitamos con urgencia.