Estos son dos elementos fundamentales para permanecer y crecer en el Señor. Nos dan la fuerza y nos preparan para enfrentar las tentaciones y repeler al maligno. Descubre por qué una persona sin oración y sin un trato continuo con Dios, jamás ve resultados espirituales en su vida y es una víctima fácil del pecado.
Hemos escuchado desde el catecismo que Dios nos ama. ¿Conoces lo que esto significa? ¿Has tenido esta experiencia? Descubre en esta enseñanza qué implica este amor derramado en nosotros y cuáles son los "requisitos" necesarios para vivirlo.
La intensidad en el amor que experimentamos está marcada por la relación que tenemos con Dios. Amar es un proceso que va desde el amor a uno mismo, hasta el amor al modo que Dios se ama a sí mismo. El amor es dar la vida y dar vida a los demás. Aprendamos a relacionarnos en el amor como Dios quiere.
La corrección es un instrumento a través del cual manifestamos y vivimos el amor al prójimo. El amor, que todo lo puede, se manifiesta en obras que hacen crecer al ser amado, aunque en el camino existan incomodidades, al final la recompensa es grande.